De acuerdo a los lineamientos de política para la inclusión y equidad en educación, la materialización de este fin se logra a partir de tres dimensiones: Las prácticas, las políticas y las culturas. Cada una de ellas tiene un alcance diferente y un tiempo de ejecución distinto. Las culturas, al ser lo más estructural, comprende su realización en un largo plazo, a mediano plazo se concretarán las prácticas y a un corto, las políticas.
Las tres dimensiones tienen en común la identificación de barreras para superar y completar los tránsitos educativos de niños, niñas, jóvenes y adultos, y garantizar su participación en el sistema educativo.
Cuando hablamos de culturas inclusivas se trata, de la posibilidad de construir permanente y progresivamente en la sociedad, y en particular en las comunidades educativas, principios, imaginarios, comportamientos y actitudes seguras, acogedoras, cuidadoras, colaboradoras, responsables y estimulantes de la diversidad a través de las cuales todas las personas aprendan, participen y logren su desarrollo integral.
Aquí te comparto un cuadro, que como profe inclusivo, puedes compartir con tus estudiantes para generar esa cultura acogedora, cuidadora y no excluyente en tu aula inclusiva.
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